Revista EIRD Informa - Las Américas
 
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La seguridad del hospital, tarea de todos

�Siempre existir�n fen�menos naturales, siempre existir�n impactos sobre el bienestar, la salud y la vida de las poblaciones, sobre todo de las poblaciones m�s marginadas�

Desde los a�os ochenta: En 1988 se forma El Centro de Coordinaci�n para la Prevenci�n de los Desastres Naturales en Am�rica Central (CEPREDENAC) como una instancia para la promoci�n de la cooperaci�n regional en la prevenci�n de los desastres en los pa�ses de Centro Am�rica. Los lineamientos del Marco Estrat�gico del Plan Regional de Reducci�n de Desastres para aquella fecha eran los siguientes: 1. La promoci�n del Enfoque Integral de Reducci�n de Vulnerabilidad como elemento indispensable de los procesos de desarrollo, lo cual implica el enfoque sist�mico en la institucionalidad nacional, la promoci�n sectorial, regional y nacional, y la adecuaci�n de normativas. 2. La ampliaci�n de la participaci�n hacia otros sectores institucionales y de la sociedad civil. 3. El fortalecimiento de capacidades locales para la reducci�n del riesgo. 4. El fortalecimiento a las capacidades de respuesta en los niveles local, nacional y regional.

En 1989 la IVII asamblea general de las Naciones Unidas (ONU) se pronunci� sobre la necesidad de fortalecer la capacidad de respuesta, sobre todo de los pa�ses en v�as de desarrollo.

La d�cada de 1990 fue declarada como �Decenio Internacional para la Reducci�n de los Desastres Naturales�. Pa�ses y gobiernos impulsaron el trabajo de prevenci�n y cooperaci�n t�cnica, para aquella fecha qued� claro que la vulnerabilidad est� asociada con el nivel de pobreza: la poblaci�n m�s afectada es siempre la m�s marginada.

A finales del 2003 la Comunidad Andina de Naciones (CAN) a trav�s del Comit� Andino para la Prevenci�n y Atenci�n de Desastres (CAPRADE) desarrolla el proyecto �Apoyo a la Prevenci�n de Desastres en la Comunidad Andina� (PREDECAN) que cuenta con cinco l�neas de trabajo 1. Fortalecimiento Sistemas y Pol�ticas Nacionales y subregionales andinas 2. Sistemas de Informaci�n, evaluaci�n y monitoreo del riesgo 3. Incorporaci�n de la gesti�n del riesgo en la planificaci�n del territorio, sectorial y del desarrollo 4. Educaci�n y sensibilizaci�n sobre gesti�n del riesgo 5. Proyectos piloto para fortalecer la participaci�n en la gesti�n local del riego.

En enero del 2005, durante la Conferencia Mundial para la Reducci�n de Desastres, celebrada en Kobe, Hyogo, Jap�n, 168 gobiernos adoptaron un plan de 10 a�os (2005-2015) para lograr un mundo m�s seguro frente a las amenazas naturales. El Marco de Acci�n de Hyogo 2005-2015 se basa en cinco prioridades 1. Lograr que la reducci�n del riesgo de desastres sea una prioridad 2. Conocer el riesgo y tomar medidas 3. Desarrollar una mayor comprensi�n y concientizacion 4. Reducir el riesgo 5. Estar preparados y listos para actuar.

La Estrategia Internacional para la Reducci�n de Desastres a cargo de la Subsecretaria General de las Naciones Unidas, que tiene como prioridad garantizar la efectiva promoci�n, coordinaci�n y orientaci�n de la reducci�n de desastres en el plano internacional, viene desarrollando campa�as mundiales para la reducci�n de desastres basadas en el Marco de Acci�n de Hyogo.

�La Campa�a Mundial para la Reducci�n de Desastres analiza la forma en la que enfrentamos los peligros relacionados a los desastres, y sirve para incrementar la conciencia entre los encargados de tomar decisiones y el publico en general sobre lo mucho que podemos hacer para reducir el impacto de los peligros� Salvano Brice�o EIRD 2003.

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Foto: ©OPS-OMS /J.Jenkins

Campa�a Mundial �Hospitales Seguros Frente a los Desastres�

�Integrar la planificaci�n para la reducci�n de desastres en el sector salud y promover la meta de hospitales seguros frente a desastres, asegurando que los nuevos sanatorios sean construidos con el nivel de resiliencia que fortalezca su capacidad de permanecer funcional en situaciones de desastre, e implementar medidas de mitigaci�n para reforzar las instalaciones existentes, particularmente aquellas que proporcionan atenci�n primaria de salud�. Marco de Acci�n de Hyogo 2005-2015: Aumento de la resiliencia de las naciones y comunidades ante los desastres.

Para el periodo 2008-2009 se desarrollar� un trabajo conjunto con la Organizaci�n Mundial de la Salud y la Organizaci�n Panamerica de la Salud con la Campa�a Mundial hospitales seguros frente a los desastres. La Campa�a se enfoca en la seguridad estructural de hospitales e instalaciones m�dicas, en mantener edificaciones de salud funcionando durante y despu�s de un desastre, y en preparar a los trabajadores de la salud a enfrentar amenazas naturales.

�Existe hoy d�a el reconocimiento internacional que los esfuerzos dirigidos a la reducci�n del riesgo de desastres deben ir de la mano con las pol�ticas, planes y programas para el desarrollo sostenible, la reducci�n de la pobreza, la gobernabilidad y la creaci�n de alianzas�, Dr. Dave Paul Zervaas ONU/EIRD 2008.

En el marco de la campa�a, la secretar�a de la ONU/EIRD, la OMS y sus respectivas oficinas regionales llevar�n a cabo una amplia gama de actividades. Estas actividades se realizar�n con otros socios del sistema de la EIRD, especialmente el Banco Mundial, varias agencias de Naciones Unidas, la IFRC y las diferentes redes que la EIRD ha establecido con ONG, el sector privado, instituciones acad�micas, legisladores y autoridades locales.

�Todas las instalaciones de salud -grandes, peque�as, urbanas o rurales- son el objetivo de esta campa�a Hospitales seguros frente a los desastres es m�s que solo proteger estructuras f�sicas, hospitales son seguros frente a desastres cuando los servicios de salud son accesibles y se mantienen funcionando a su m�xima capacidad inmediatamente despu�s de un desastre o una emergencia. Un hospital seguro no colapsar� en un desastre, matando pacientes y personal; puede continuar funcionando y proveyendo sus servicios como una instalaci�n cr�tica en la comunidad cuando m�s se requiere; y es organizado, con planes de contingencia y personal de salud entrenado para mantener la red funcionando�. OMS/OPS 2008.

Tarea de todos

Todo personal que desempe�a un cargo dentro del hospital, sin importar nivel, ni jerarqu�a es indispensable para la seguridad en caso de desastre.

La mala organizaci�n de un centro hospitalario afectar� directamente a la poblaci�n ya sea grande o peque�a, urbana o rural. Por ello la capacitaci�n y el entrenamiento constante para el manejo adecuado de �ste frente a un desastre y sobre todo el objetivo de crear en �l conciencia sobre la importancia de que se adopten medidas de prevenci�n, es fundamental para que la respuesta en caso de desastre sea pronta, eficiente y sobre todo autom�tica, sin meditaciones, ya que est� en juego la vida de los trabajadores y pacientes que se encuentran en sus instalaciones.

Para tal prop�sito, la tarea de interesar a un personal multidisciplinario (M�dicos, Enfermeras, T�cnicos, Administrativos, etc.) e involucrarlo en forma organizada y voluntaria para que su participaci�n en la prevenci�n ante los desastres sea un objetivo com�n y capacitarlos en aspectos muchas veces alejados de su propia disciplina, es indispensable para la respuesta a un impacto de gran proporci�n que afecta las instalaciones de salud y sus vidas.

Los desastres recientes en las Am�ricas y el resto del mundo � incluido el hurac�n Mitch en Centroam�rica, el deslizamiento en Venezuela, los terremotos en El Salvador, el hurac�n Isidore en el Caribe, el terremoto en Per�, el terremoto en China y otros � han producido lecciones valiosas con respecto al da�o a establecimientos de salud y a las soluciones para reducir el impacto sobre la infraestructura vital, pero sobre todo hemos aprendido una vez m�s que en el manejo de la emergencia o desastre el factor humano en la respuesta a un impacto es vital para salvar vidas.

En los Centros de Salud, la falta de recursos, de planificaci�n, de prevenci�n, de capacitaci�n, de suministros y de preparaci�n general, psicol�gica, y sobre todo el desinter�s despierta sentimientos devastadores de impotencia y desesperanza.

Si se a�ade a lo anterior la falta de un sistema de seguridad y de alerta, y de planes y protocolos de respuesta a los desastres en un centro hospitalario; el impacto que esto causar� en la persona, ser� catastr�fico.

La preparaci�n previa al desastre es una actividad en la que deben intervenir diligentemente todas las personas que intervienen en un sistema de salud, es decir, a nivel profesional y sobre todo a nivel personal.

La capacitaci�n y el adiestramiento por medio de simulacros y simulaciones constituyen una preparaci�n excelente para afrontar un desastre en el hospital, si se efect�an en forma organizada, planeada y programada regularmente (cuatro a cinco veces al a�o). Estas pr�cticas constituyen medios estupendos para �sensibilizar� a personas y grupos frente a un desastre revirtiendo as� en gran medida el p�nico que pudiera surgir.

Cuando una situaci�n est� bien ensayada, se afronta naturalmente, con un sentido elevado de competencia y confianza a la conciencia del peligro, a su vez facilita la desensibilizaci�n psicol�gica e incrementa la confianza en las capacidades de actuar y de afrontar la situaci�n, y disminuye la incidencia y la magnitud de reacciones psicol�gicas negativas, como rechazo, p�nico y choque.

Las estrategias de respuesta durante la preparaci�n previa al desastre, deben estar orientadas a la capacitaci�n y actividades que se acerquen a la realidad. Se busca con todo ello, disminuir el rechazo, de modo que los trabajadores puedan movilizarse y protegerse por s� mismos.

Mantener unos niveles aceptables de seguridad en centros hospitalarios es uno de los temas m�s complejos de la seguridad en los denominados espacios p�blicos. Un centro hospitalario es una peque�a ciudad, pero con mayor densidad de poblaci�n, con todos sus peligros, riesgos y amenazas, y adem�s habitado con personas enfermas y visitado por otras que desconocen el lugar.

Quiz� esta complejidad, en muchos de los casos, contribuye a que los problemas cl�sicos en estos centros de salud a�n est�n por solucionar. Falta una evaluaci�n de riesgos rigurosa, mantener vivos los planes y protocolos de seguridad, soluciones t�cnicas estructurales para los edificios, realizar un mantenimiento integral de las instalaciones, pero ante todo fomentar la conciencia social, potenciar la informaci�n y la cultura de la prevenci�n.

Dra. Zonia Luz Reyes Flores
Universidad Nacional de Trujillo Per�, Facultad de Educaci�n
Directora Ejecutiva S.O.S Vidas Per�
zonialuz@yahoo.com

Prof. Lincoln Alayo Bernal
Director Acad�mico S.O.S Vidas Per�
prevencionpe@yahoo.com
www.sosvidasperu.org


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